Soy Esteban Espada, padre de la familia mas asombrosa de este mundo, con don 2 hijos de 5 años. Uno de ellos diagnosticado de Autismo hace 1 año. Escribo esta carta para visibilizar la vida que tenemos las familias que vivimos día a día con el Autismo.
¡Bienvenido! Pasa, entra en nuestras vidas aunque no te hayamos dado permiso. Esta carta va para ti, si ¡tú! ese gran desconocido para mí y para la sociedad, con esta carta solo espero que la gente sepa que aunque eres invisible haces que cada día sea un reto para mí y para mi familia. Que vivamos en una profunda incomprensión de la sociedad. Mi hijo no es malcriado, ni le consentimos más que a otros niños y tampoco es raro. Lucho para que realmente exista la INCLUSIÓN. Esa inclusión, que ahora esta tan de moda, se haga realidad que la sociedad nos empiece a entender y podamos tener un futuro esperanzador para nuestros hijos.
Con esta carta quiero visibilizarte, quiero que la gente sepa cómo eres y la incertidumbre de que puedes llegar a tener en las familias que te tenemos cerca. Vivir con ansiedad a los retrocesos y la lenta evolución tras horas y horas de terapias, no poder llevar a mi hijo a fútbol, baloncesto, judo o ajedrez.
Eres un gran desconocido y por esta razón quiero que la sociedad sepa que no te vamos a encontrar de la misma manera en las personas en las que estás, cada persona es diferente y tiene afectadas diferentes áreas por lo que se hace muy complicado hacerte visible. También haces que tenga un miedo profundo, cómo vivirá mi hijo si falto algún día. Cierto es que todo padre o madre tiene ese miedo por sus hijos, pero tú en muchos casos haces que nuestros hijos sean dependientes de sus padres, más si cabe que el resto de hijos.
No dejas de sorprenderme, haces que un día mis sentimientos cambien, que pase de la angustia y la confusión hasta la sorpresa y admiración por todo lo que te rodea.
Sigues siendo una incógnita para el mundo de la medicina, no está claro tu origen. Muchos profesionales no te conocen bien y se sorprenden cuando se habla de ti. Se empeñan en mandar una medicación para paliar tus efectos, cuando no se dan cuenta que la mejor medicina es la terapia y la inclusión.
En esta carta no todo van a ser reproches, también tengo que agradecerte muchas cosas.
Me has hecho una mejor persona, más sensible a los problemas míos y de los demás. Me has hecho tener una empatía especial al resto de la gente.
Desde que estas en mi vida me has hecho darme cuenta de la fortaleza interior que tengo para sobreponerme a los problemas del día a día. Ser un apoyo en toda la gente que me rodea, a verme como una persona que no se pone límites y que cada uno es capaz de llegar a donde se proponga. Haces que luche contra las injusticias que se producen y que no me quede callado, que por mi hijo sea capaz de salir de mi zona de confort para que tenga lo que se merece y le ayude a tener un futuro igual que el resto de niños.
Me has dado la posibilidad de ver la vida de otra perspectiva a través de los ojos de mi hijo, una mirada tan distinta y tan enriquecedora a la vez. Me haces querer a mi hijo por quién es y no por quien puede llegar a ser. Has conseguido que conozca gente maravillosa en este camino que tenemos que vivir a tu lado, personas que luchan igual que yo para que seas visible, para que la sociedad te entienda.
Con esta carta quiero quitarte la máscara, esa mascara azul, esa máscara de desconocimiento y de incomprensión. Te hablo a ¡ti! EL AUTISMO.
¡Qué grande eres Esteban! Un texto increíblemente precioso.
Gracias por compartir, no tenía idea de lo que es el TEA. saludos cordiales desde Monterrey México.
Qué necesaria esta carta
Gracias por poner palabras a lo que sentimos los padres y la madres con niños autistas.
Mucho ánimo Esteban, es verdad que el TEA, como tantas otras enfermedades “raras”, necesita mucha más visibilidad. Con cartas como la tuya seguro que se logra. Un abrazo
Me sentí plenamente identificado con tus palabras, soy papá de una Niña con TEA, ella es mi fuerza y mi motivación. Saludos desde Barquisimeto, Venezuela. Gracias a David Summers por referir a leerte. Abrazos Azules.
Esteban ,preciosa la carta, ojalá te sirva de altavoz y para dar mucha más visibilidad a esa enfermedad.